Que no queremos trabajar en el campo, dicen…
Hace ya unas semanas que venimos escuchando por parte de la patronal del fruto rojo de Huelva, lo que se viene repitiendo desde hace tiempo por estas fechas: Que la gente de Huelva no quiere trabajar en el campo.
Sus argumentos se basan en el sondeo realizado por una plataforma de la Junta de Andalucía llamada GEA, a la que la gente que quiera trabajar en el campo puede acceder para apuntarse a las distintas campañas, hasta el 1 de diciembre como fecha límite, la cuál actualmente no funciona, y no es la primera vez que pasa.
Desde JHL queremos aclarar unas cuantas cuestiones para que se entienda mejor cuál es el funcionamiento de dicha plataforma.
Como acabamos de decir la fecha límite para apuntarse a las campañas de recogida del fruto rojo es el 1 de diciembre, y todas son para empezar a trabajar a partir de marzo. Básicamente, y lo que no te dicen tan claramente es que lo que pretenden asegurarse es una mano de obra para el apretón fuerte que apenas sobrepasa el mes de trabajo.
Las personas que necesitan trabajar, porque desde diciembre hasta marzo tenemos la mala costumbre de comer y mantener a nuestras familias, no van a esperar sentadas cruzadas de brazos. Es por ello que papeles en mano, fotocopia de la tarjeta de la Seguridad Social, del DNI y de la cartilla del banco, y su número de teléfono apuntado, ( los CV del campo) cogen su coche y van empresa por empresa entregándolos, con la suerte de que llamen pronto. No es raro que te encuentres con tajos en los que te dicen que no quieren españoles. (De esto saben bien quienes lloran porque no tienen mano de obra).
Cabría también recalcar que la gran mayoría de ofertas de empleo que se suben a esta plataforma están en fraude de ley con los derechos de los trabajadores. Como hemos venido comprobando desde hace un par de años, donde nos encontramos salarios por debajo del SMI, horas extras en fraude con el Convenio Colectivo de Trabajadores del Campo de Huelva, incluso advirtiendo el cobro por unas viviendas que debieran ser gratuitas, y también el impago del desplazamiento.
Que todo esto se publique en una plataforma que pertenece a la Junta de Andalucía, en un organismo público que se supone que debe velar por los derechos de los ciudadanos y se queden tan panchos, dice mucho de cómo funciona el sistema.
Para comprobar la falacia que intentan vendernos una y otra vez de que no cuentan con mano de obra, y que no queremos trabajar en el campo, “porque vivimos del subsidio agrario” (la gran cuantía de 430 € al mes durante 6 meses, si has pagado los casi 130 € de sello agrario al mes durante todo el año, requisito indispensable para poder cobrarlo) también puede accederse a los grupos de trabajo de Facebook de la provincia de Huelva.
Véanse Trabajador@s del campo y almacenes de la provincia de Huelva, o Ofertas de empleo agrícola Huelva.
En estos grupos se leen auténticos mensajes de desesperación de gente buscando trabajo, todo el año no solo ahora, y también vemos cómo crecen los discursos de odio en las personas que no encuentran trabajo ni por activa ni por pasiva.
Porque aquí hay un detalle, o un detallazo que no se está teniendo en cuenta. Y es que resulta que en esta plataforma GEA se oferta trabajo en octubre para trabajar en marzo, pero las campañas comienzan entre diciembre y enero. De hecho, como vemos en las noticias las compañeras con contrato de origen empiezan a llegar a finales de diciembre todos los años, al igual que ocurrirá este año con los compañeros de Honduras y Ecuador. Un detallito que como venimos contando desde hace tiempo forma parte de la estrategia perfecta para enfrentarnos a unos con otros, mientras nos explotan a todos.
Tampoco se tiene en cuenta a la hora de evaluar la falta de mano de obra a través de esta plataforma, que la gente que trabaja de un año para otro en el mismo tajo, tan solo tiene que esperar una llamada de teléfono cuando comience la campaña, sin la necesidad de inscribirse en ningún lugar.
Así que como veréis, que se diga una y otra vez que la gente de Huelva no quiere trabajar en el campo, y se basen en los resultados de esta plataforma a la que dicen que se han apuntado 800 personas de los 10.000 puestos de trabajo que habían ofertado, no solo es una auténtica falsa, sino que forma parte de un entramado estratégico que fomenta la pelea del último contra el penúltimo.
Y sobre todo, que les permite con la total libertad y el complacimiento de los distintos gobiernos (los de izquierda y los de derecha) viajar a los países más empobrecidos, a las zonas de más necesidad, a buscar una mano de obra vulnerable y fácil de explotar.
Como vemos recientemente que ha ocurrido con la contratación en origen de las personas de Honduras y Ecuador, a las que se reconoce públicamente y sin ningún tipo de tapujo que no se les va a pagar el SMI. Véase aquí la oferta de empleo en la página del gobierno de Ecuador.
41,96 € en lugar de los 49,32 que les corresponden según la última subida del SMI.
Personas a las que aseguran que van a trabajar durante 6 meses, pero que nadie les ha contado que al igual que las compañeras de Marruecos, y las de aquí, en todo momento van a depender de la producción, y habrá semanas que trabajen 2 o 3 días, y días que trabajen 2 o 3 horas al comienzo, y luego les obligarán a echar horas extras cuando apriete el calor.
Personas que también tendrán que pagarse su viaje de vuelta, un viaje transatlántico nada barato, a las que tampoco han contado que les pueden despedir en periodo de prueba sin ni siquiera haber ganado suficiente dinero para pagárselo.
Como podemos comprobar existen grandes intereses en la famosa frase que dice que “no queremos trabajar en el campo”.
Y desde aquí queremos aprovechar para decirles alto y claro :
No es que no queramos trabajar en el campo, lo que no queremos es que nos exploten como lleváis haciendo toda la vida en la mayoría de los tajos.
Aun así, por desgracia, al no tener otras muchas alternativas de trabajo, trabajamos todos los años en la campaña del fruto rojo, aun sabiendo que nos vais a explotar.
Ofreced a la gente un puesto de trabajo de 6 a 8 meses mínimo, con contratos fijos y no los de obra y servicio que nos hacéis firmar año tras año, y pagad un buen salario a los trabajadores. O simplemente, pagad de una vez el Salario Mínimo, y cumplid con el Convenio, veréis como no tenéis que ir a buscar mano de obra fuera. ( Véase el caso de la empresa Flor de Doñana )
Pero claro, eso no os interesa porque es más fácil explotar a personas que vienen de los lugares más pobres, que se van a conformar con lo mínimo, y a quienes también utilizáis para decir a los autóctonos qué si no nos aguantamos con las normas y los abusos, tenéis a miles que lo harán por menos incluso.
La jugada perfecta que nosotras hemos entendido perfectamente, por lo que no consideramos que el problema sean nuestras compañeras y compañeros que vienen a buscarse la vida desde otros países.
El problema sois vosotros los empresarios, y este sistema de monocultivo intensivo que tenéis implantado en nuestra provincia, que sobrevive y os genera cada año más millones, a costa de la explotación de los y las jornaleras de aquí y de allá, y de nuestros recursos naturales. Un problema que se mantiene gracias a la complicidad de todas las partes actoras, desde instituciones, gobiernos, sindicatos hasta Inspección de Trabajo.
Nosotras lo tenemos claro, no son las personas migrantes quienes nos están quitando el trabajo. Sois vosotros quienes lleváis años negándonos parte de nuestro salario y de nuestros derechos, tanto a autóctonos como a migrantes.